domingo, 17 de marzo de 2013

Cómo no debe analizarse el caso Lin Biao


Si uno quiere un ejemplo de cómo no se debe realizar un análisis científico de Lin Biao y la “lucha entre dos líneas” en el PCCh y de cómo hacer poco por rehabilitar su figura, el artículo que a continuación publicamos cumple con los requisitos. Llama la atención que todo el “estudio” de un partido sobre el caso Lin Piao se inicie con una afirmación categórica que lo descalifica como serio, objetivo y científico:  

“Una aclaración previa. Nosotros no contamos ni con documentos ni con datos propios, por lo mismo nuestros análisis son el producto de la lógica y de la consecuencia revolucionaria de nuestros análisis”

Casi una confesión de incompetencia científica. Existen por lo menos hechos que fueron visibles para todos dentro y fuera de China, existen testimonios de otros hechos menos visibles que fueron proporcionados por los grupos en pugna, existen además documentos conocidos dentro y fuera de China que circularon en la época de la revolución cultural. Sin embargo, el artículo se basa en su mayor parte en la versión sesgada y tampoco científica de Avakian y su partido; utilizando su contenido para refutarlo, basándose en la “lógica” (sic!!!) y en la “consecuencia revolucionaria” (sic!!!), mas no en los hechos ni en el material disponible. Ajenos al método marxista, se apoyan a veces en algunos hechos históricos conocidos y también en otros “hechos” basados claramente en suposiciones o deducidos por “lógica”.

Es extraño que los autores del “estudio” no se remitan entre muchos documentos, a los del propio Mao Zedong, publicados por los guardias rojos en múltiples tomos durante la revolución cultural, en vida de Mao. Las obras de Mao no se limitan a los cinco tomos de sus obras escogidas. Tampoco utilizan material ya disponible en 1996 –año de publicación del artículo– y no corrigen nada en el 2005, cuando fue “corregido y aumentado” según se dice al pie del artículo.

Aunque reconocen a Mao como el líder a seguir, los autores del artículo no tienen ningún prejuicio en establecer este patrón: 1) Lin Biao era un revolucionario marxista consecuente, 2) Mao se equivocó con respecto a él gracias a la acción de Zhou Enlai, 3) Mao estaba muy enfermo por lo que es explicable que se equivocara y que viera a través de los ojos de Zhou; 4) se equivocaron también “los Cuatro”, al atacar a Lin; 5) Zhou Enlai era el poder detrás del trono; 6) la restauración del capitalismo en China se inicia en 1971 con la caída de Lin Biao y en vida de Mao Tsetung (cinco años antes de su muerte en 1976).

Sin embargo, los discursos de Mao en 1971, demuestran a un Mao claro y fiel a sus ideas. Esos discursos se dieron en el contexto de su lucha contra Lin Biao. Son discursos pronunciados en reuniones durante la gira de Mao a las provincias del sur, entre agosto y setiembre de 1971. Ese Mao que se nos quiere pintar como decrépito e incoherente, está en plena lucha contra Lin Biao, y tiene todavía bríos para hacer campaña en el interior de China como en sus viejos tiempos.

En ese discurso, hace un breve recuento de la lucha entre las dos líneas en la historia del PCCh. Al hacer esto, Mao establece claramente el carácter de la lucha contra Lin Biao, situándola sin decirlo (se diría después del XI Congreso) como la décima lucha entre dos líneas en el partido. De este modo sus diferencias no son de matiz dentro de una misma posición o línea sino entre dos líneas excluyentes, una diferencia de principios. No es Zhou Enlai ni los derechistas del partido quienes la inician y la libran, es Mao Zedong y la “banda de los cuatro” quienes se enfrentan a la fracción de Lin Biao.
 

En la política china, cuando se quiere atacar al líder de una fracción, primero, se ataca a su lugarteniente. En la historia de la antigua China esto equivalía a atacar al primer ministro para atacar al emperador. Sin embargo, en esta ocasión, el ataque de Mao fue directo contra Lin Biao, su esposa Ye Qun y sus generales. Aunque no esbozó ninguna de las diferencias políticas que los distanciaban, la sola crítica a su “íntimo compañero de armas” y “sucesor” debió caer como una bomba entre todos los que la escucharon. Los seguidores de Lin Biao, se la transmitieron al Vicepresidente en la primera semana de setiembre, generando un revuelo en su entorno sobre la actitud a tomar. Sabían que se les venía encima una purga. Mao lo expuso de esta forma:   

“Entonces se dio la lucha en la Conferencia de Lushan de 1970... En la Conferencia de Lushan, realizaron un ataque sorpresivo y realizaron actividades clandestinas. ¿Por qué no se atrevieron a actuar abiertamente? Está claro que tenían algo que esconder... Ocultaban cosas a tres [Mao, Kang Sheng, Zhou Enlai –los otros dos: Lin Biao y Chen Boda] de los cinco miembros del Comité Permanente del Buró Político.  También ocultaban cosas a la gran mayoría de los camaradas del Buró Político, fuera de sus propios grandes generales. Esos grandes generales incluían a Huang Yungsheng [Huang Yongsheng], Wu Fa-sien [Wu Faxian], Ye Chun [Ye Qun], Li Tso-peng [Li Zuopeng] y Chiu Hui-tso [Qiu Huizuo], así como a Li Hsueh-feng y Cheng Wei-shan. Antes de lanzar su ataque sorpresivo, no emitieron ni un susurro...

En mi opinión detrás de su ataque sorpresivo y de su actividad clandestina había un objetivo, una organización y un programa. Su programa era nombrar un presidente del Estado y alabar al “genio”: en otras palabras, oponerse a la línea del IX Congreso y derrotar la agenda de tres puntos del II Pleno del IX Comité Central. Cierta persona estaba ansiosa de ser presidente de Estado, dividir el partido y tomar el poder...

El camarada Lin Piao no discutió su discurso [en la Conferencia de Lushan de 1970] conmigo, tampoco me lo mostró. Cuando tenían algo que decir, no lo revelaban por anticipado. Probablemente porque pensaban que tenían las cosas en sus manos y estaban convencidos de su éxito. Pero tan pronto se les dijo que sus ideas no eran aceptables, se pusieron nerviosos. Al principio fueron atrevidos, dando la impresión de que podían arrasar en Lushan o detener la rotación de la tierra. Pero después de pocos días, retiraron su propuesta con celeridad. Si era correcta ¿por qué la retiraron? Esto demuestra que estaban escasos de ideas y en estado de pánico...

... La lucha en esta Conferencia de Lushan [hubo otra en 1959] es también otra lucha entre dos cuarteles generales...

... Es difícil –para alguien que ha tomado el liderazgo en cometer graves errores de principio, errores de línea o dirección– reformarse. Si vemos el pasado, ¿Chen Tu-siu se reformó? ¿Se reformaron Chu Chiu-pai, Li Li-san, Lo Chang-lun, Wang Ming, Chang Kuo-tao, Kao Kang, Yao Shu-shi, Peng Te-huai o Liu Sao-chi? Ellos no se reformaron.

Hablé con el camarada Lin Piao y algunas de las cosas que dijo no eran correctas...

...Sobre importantes cuestiones de principio, no hago concesiones. Después de la Conferencia de Lushan, empleé tres métodos: el primero fue tirar piedras, el segundo fue mezclar arena y tierra, y el tercero fue socavar la muralla. Critiqué el material escrito por Chen Po-ta que engañó a mucha gente. Aprobé el informe del 38º Ejército y el informe de la Región Militar de Tsinan que se oponían a la arrogancia y a la complacencia. Luego se realizó una larga discusión en la reunión del Comité de Asuntos Militares, en la que no hubo una sola palabra de crítica a Chen. Hice algunas anotaciones críticas acerca de eso en un documento. Mi método fue escoger algunas de esas piedras, escribir algunas notas sobre el tema y dejar que las discutan. Esto es lo que yo llamo tirar piedras. Cuando la tierra está muy comprimida, no puede respirar. Si se mezcla con un poco de arena, entonces puede respirar. El staff del Comité de Asuntos Militares era demasiado uniforme en su composición y necesitaba tener algunos nuevos nombres. Esto es mezclar arena y tierra. La reorganización de la región Militar de Pekín era socavar la muralla...

... es un hecho que el asunto de Lushan no ha terminado, el problema no ha sido resuelto. Ellos quieren suprimirlo. No permiten siquiera que los cuadros del rango de jefes de Comando General y departamentos del Estado Mayor General sepan de ello. ¡Esto no puede ser!

... Ahora que los comités regionales del partido han sido establecidos, deberían ejercer el liderazgo unificado...
...
“Aprender de Taching en industria, aprender de Tachai en agricultura; que el pueblo de todo el país aprenda del Ejército Popular de Liberación”. Esto es incompleto. Deberíamos agregar: “Que el Ejército Popular de Liberación aprenda del pueblo de todo el país”...
...
“Nunca aprobé que la esposa de uno fuera la administradora en la propia unidad de trabajo de uno. En el caso de Lin Piao, es [su esposa] Ye Chun [Ye Qun] quien administra su oficina..."

(Tomado de Stuart Schram, “Mao Tse-tung Unrehearsed. Conversaciones y cartas, 1956-71”, Penguin Books, 1974, páginas 292-298. Traducción y edición propia) Una versión completa del discurso, y alternativa a nuestra traducción del fragmento: Aquí

Documentos de Mao, como éste circularon durante la revolución cultural. No fueron editados ni por Mao ni por la oficina del CC encargada de publicar las obras de los líderes del partido. Como se puede apreciar en la mención de la fuente de la cita de Mao, ya en 1974 este discurso era conocido fuera de China. Eran documentos conocidos mundialmente.

Leyendo el texto, se aprecia la lucidez de Mao, contradiciendo el contenido del artículo del PCB (mlm). De pasada, también menciona críticamente a Chen Boda, poniendo en entredicho la versión del artículo sobre el origen de la caída de éste, que fuera secretario personal y escritor de artículos y discursos de Mao.

Más allá de los rellenos, hay tres afirmaciones categóricas de los autores del artículo que publicamos, eximiendo a Mao Zedong de la responsabilidad de la caída política de Lin Biao:

1) Dicen: “Según la versión china de los restauradores revisionistas... Lin Piao, fue un ‘traidor’ a Mao...”.

Como se puede colegir del fragmento del discurso reproducido, ésa era la opinión de Mao, sin mediación o influencia de Zhou Enlai. Mao establece que entre él y Lin Biao hay divergencias de principio, que el grupo de Lin Biao tiene objetivos, organización y programa ajenos a los suyos. Que la lucha entre Lin Biao y Mao es una lucha entre dos líneas, entre dos cuarteles generales diferentes y opuestos.

2) Dicen: “su desaparición [de Lin Biao], constituye el punto de arranque de la restauración capitalista en China”.

Es decir, en vida de Mao y todavía en actividad éste, China inició la restauración capitalista.

3) Dicen: “La conclusión última que podemos extraer del asunto Lin Piao es que el c. Mao cometió uno de los errores más serios de su prodigiosa y extraordinaria vida política revolucionaria, principalmente debido a su salud muy quebrantada, equivocándose completamente en el caso Lin Piao y creyendo en la sinceridad del maquiavélico Chou En-lai.”

Nuevamente, la teoría de la caída de Lin Biao explicada por la acción del “poderoso” Zhou Enlai. Según ésta, Mao Zedong y la “banda de los 4” son sujetos pasivos o centristas en esta confrontación entre “la izquierda” y “la derecha” del PCCh. Esto no corresponde a los hechos ni a lo que dicen los documentos publicados del PCCh. Mao Zedong y “los cuatro” fueron los que iniciaron y encabezaron la lucha contra la fracción de Lin Biao, subordinando en esa lucha a la derecha y a los centristas. Las primeras víctimas de esa confrontación fueron algunos que conformaron el Grupo Central de la Revolución Cultural –el máximo organismo que bajo dirección de Mao encabezó la Revolución Cultural– que actuaba bajo la presidencia de Chen Boda y que incluía a Wang Li, uno de los importantes redactores de los artículos polémicos contra el PCUS que todos conocemos. Curiosamente, ambos –Chen Boda y Wang Li– dejaron memorias que, al parecer, algunos maoístas defensores de Lin Biao no toman en cuenta.
 

La referencia a autores extranjeros hablando sobre el caso Lin Biao es pobre y no responde a un criterio de investigación científica. No cita a ningún especialista burgués o marxista sobre el tema. El acápite, citando a Kissinger, sólo busca respaldar su versión del Mao decrépito, senil, prácticamente incapaz, aunque correspondan a un periodo posterior -no muy lejano, es cierto- al caso Lin Biao. 

En el colmo de la confusión, Zhou Enlai a veces es cabeza de los centristas y en otras lidera a los derechistas. Asimismo, hacen tabla rasa de cualquier diferencia política entre la fracción de Mao y “los 4” y la fracción de Lin Biao, y ponen en un mismo lado a Chen Boda, Lin Biao, Kang Sheng, Zhang Chunqiao, Jiang Qing, cuando éstos estaban en campos enfrentados, por lo menos, desde 1969. El hecho de que ambas “camarillas” estuvieran sentadas, juntas, en el banquillo de los acusados durante los juicios de 1981, proseguidos por los dirigentes revisionistas, no refuerza su posición de considerarlas como un solo y único grupo. ¿Quién estuvo en lo correcto en estas pugnas? Ese es otro tema que sólo se puede resolver ubicando correctamente el caso Lin Biao en el contexto de la lucha entre fracciones del PCCh y la situación interna e internacional de China.

Lin Piao:
¿Un cadáver en el armario o estafa revisionista?
Comisión Ideológica del Comité Central del Partido Comunista de Bolivia
(marxista-leninista-maoísta) 

Nuestra verdad acerca del asunto Lin Piao 

INTRODUCCIÓN

Nuestro Partido (mlm), tiene como una de sus raíces más importantes la ruptura con el grupo antipartido de Oscar Zamora Medinacelli, determinación que se hizo conocer al Comité Central del Partido Comunista Chino y al gobierno de China Popular en 1971, cuando el camarada Jorge denunció por traición a la revolución y al socialismo y corrupción económica a dicho impostor y sus secuaces. El Partido Comunista y la dirección china, ya en poder de la derecha de Chou En-Lai y Teng Siao-ping y todavía en vida del camarada Mao, desoyó nuestra acusación, reconoció a Zamora y le proporcionó ayuda indefinidamente, comprobándose que China ya había "cambiado de color".
  
Esta no es más que una introducción al estudio de nuestro Partido sobre el caso de Lin Piao, Ministro de Defensa chino, "íntimo compañero de armas del Presidente Mao" y uno de los dirigentes más importantes durante la Revolución Cultural Proletaria China. (RCPCh).
 
Según la versión china de los restauradores revisionistas que, lamentablemente es compartida y coincide con la del Movimiento Revolucionario Internacionalista y el Partido Comunista Revolucionario (EU), Lin Piao, fue un "traidor" a Mao, mientras aquellos (los revisionistas-restauradores) fueron muy "leales" a Mao. Según estos restauradores, Lin Piao fraguó un complot reaccionario y quiso asesinar a Mao, de modo que las fuerzas de la izquierda revolucionaria, en especial los "cuatro" y Mao en persona, se vieron obligados a desatar toda una campaña para acabar con la influencia de Lin y sus apoyos que habrían constituido una fracción "derechista" camuflada de izquierdista en el seno del Partido y del Ejército.
 
Según esta tesis que la iremos analizando, Lin Piao y su grupo (Chen Po-ta, Wu Fa-sien y otros), además de ser "pro-esclavistas", "pro-confucianos", etc., se tornaron como los enemigos principales de la Revolución China, a partir de 1971.
 
Ahora bien, los criterios que nos dan los camaradas sobre todo el PCR-EU y del MRI constituyen verdaderas piezas de antología por lo forzado de sus argumentaciones para evitar un esclarecimiento sincero y revolucionario del caso Lin Piao que tiene que ver directamente con la restauración capitalista en China.
 
Una aclaración previa. Nosotros no contamos ni con documentos ni con datos propios, por lo mismo nuestros análisis son el producto de la lógica y de la consecuencia revolucionaria de nuestros análisis.
 
I. EL PCR-EU Y EL CASO LIN PIAO. 
 
El presidente del PCR EU, Bob Avakian, ha escrito una serie de documentos y pronunciado varios discursos y conferencias abordando el caso "Lin Piao" que ahora tenemos la oportunidad de analizar exhaustivamente para un conocimiento pleno de la militancia mundial marxista-leninista y maoísta.
 
1. El primero de esos documentos titula: «La pérdida en China y el legado revolucionario de Mao Tse-tung»
 
Avakian comienza reconociendo que Lin Piao fue una figura importante en la Revolución Cultural y fue conocido como "el más íntimo compañero de armas de Mao". Sin embargo añade inmediatamente que por aquellos tiempos ya se oponía fuertemente a Mao y a la Revolución Cultural. Agrega que se oponía a aquellos que querían convertir a China en un país parecido a la URSS, es decir a constituirse en una dependencia soviética, se oponía por tanto al revisionismo soviético de "manera consecuente".
 
Lin Piao, según Avakian quería derrocar a gente como Chou En-lai y sus socios, pero Mao no estaba de acuerdo con ese derrocamiento porque uniría a muchas fuerzas poderosas contra la Revolución Cultural. Claramente se sostiene que Lin era un dirigente connotado de la GRCP. Cuando Lin comprendió que no tenía éxito en derrocar a Chou, "se volvió en contra de todo alboroto". Pero a continuación nos dice Avakian que ya en ese tiempo, la posición de Lin acerca de muchas cuestiones era "bastante semejante a la de Chou". ¿En qué quedamos? 
 
Siguen algunas incongruencias: Se dice que antes del 9° Congreso en 1969, Lin hizo clara su posición derechista a favor de la producción y contra la lucha de clases mostrando su odio a las "nuevas cosas socialistas". La contradicción entre Lin y Chou, según Avakian, se limitaba a su valoración de las superpotencias. Lin que consideraba a los soviéticos malos, pero socialistas, mientras que Chou quería aliarse a los Estados Unidos.
 
Otra vez según Avakian, en el verano de 1970 Mao hizo "el análisis que la Unión Soviética se había convertido en el peligro principal para China" y que, en consecuencia había que hacer algunos cambios, compromisos y acuerdos con el Oeste, para tratar con el creciente peligro soviético contra China. Mao y Chou, dice Avakian, llegaron a un acuerdo sobre esto, pero agrega no por las mismas razones. Esta posición de Mao lo llevó a una confrontación con Lin Piao.
 
«Esta lucha terminó en el derrocamiento de Lin Piao políticamente y culminó en su atentado contra Mao (también intentó asesinar a Chou). Lo que siguió fue la huida desesperada de Lin, resultando en su muerte cuando su avión se estrelló en la República Popular de Mongolia en septiembre de 1971. »
 
El párrafo que sigue en el texto es de una singular originalidad y retrata completamente lo que se puede llamar un sofisma construido muy trabajosamente: 
 
«Las fuerzas de Chou En-lai así están en la cumbre de su poder, la línea de Chou tiene tremenda influencia sobre cuestiones del interior y del exterior - y sobre las relaciones entre los dos. Entonces así se presenta el escenario para la última batalla de Mao, que resultó, después de lucha amarga y la muerte de ambos Chou y Mao y el triunfo del revisionismo, representado por aquellos que contaban con Chou como su símbolo (y su protector durante su vida) y con Teng Siao-ping como su activista más agresivo» 
 
Siguiendo con la "construcción" de la historia, Avakian dice que la traición de Lin tuvo un efecto traumático en China y necesitó la restauración de los opositores de Lin, es decir la gente derrocada durante la Revolución Cultural, el más prominente entre ellos Teng Siao-ping. Se agrega que Chou insistió siempre y fuertemente en la rehabilitación de todos los derrocados en la GRCP. Mao estaba de acuerdo con ello, pero no tenía fe en Teng.
 
Avakian expresa que debía ser obvio que la Derecha tenía mucha fuerza y fomentaba una corriente contra la GRCP con la máscara de oponerse a Lin Piao. La Izquierda por su parte con Mao se mostraba activa en desarraigar el oportunismo de Lin Piao. De modo que el pretexto de los derechistas era el núcleo activo de la Izquierda. Se dice muy seriamente que esa lucha la ganó la Izquierda, lo que condujo al X Congreso de 1973 que fue otra "victoria" de la izquierda.
 
Se sabe que fue el X Congreso el que desató la célebre e infausta campaña contra Lin Piao y Confucio. Pero Avakian ingenuamente nos dice que el blanco de dicha campaña era Teng Siao-ping y también secundariamente Chou En-lai, lo cual nos parece totalmente falso, pues como el mismo lo indica la batalla encarnizada se centraba en Lin Piao que, por otra parte, ya había sido liquidado.
 
Textualmente el libro de Avakian relata de esto modo el proceso: 
 
«Primero, es imposible entender (las últimas batallas de Mao), sin comprender que la traición de Lin Piao y su derrocamiento final tuvieron un efecto traumático en China a todos los niveles, y tuvieron repercusiones por toda la sociedad. Necesitó unos cambios importantes de organización (sic), especialmente en el ejército, donde quedaban todavía muchos apoyantes poderosos de Lin.
 
Particularmente necesitó (sic) la restauración de unos opositores de Lin Piao –gente que había sido derrocada durante la Revolución Cultural. El más prominente entre ellos fue Teng Siao-ping.
 
Chou En-lai insistió fuertemente en la rehabilitación de Teng, conforme con sus esfuerzos de rehabilitar a todos los derrocados durante la Revolución Cultural. Mao estaba de acuerdo con algo de eso....» 
 
2. El segundo libro de Avakian: "Las inmortales contribuciones de Mao Tse-tung", igualmente sigue el mismo rumbo.
 
"Específicamente, en los últimos años de la vida de Mao, quedó perfectamente en claro que la Unión Soviética representaba el peligro principal para China y, especialmente en el contexto del acelerado impulso hacia una guerra entre imperialistas con Estados Unidos, era muy probable que la Unión Soviética lanzara un ataque en gran escala contra China, quizá incluso una invasión frontal. En tales circunstancias, era muy correcto para China efectuar ciertas maniobras diplomáticas y de otro tipo (sic) para atajar a la Unión Soviética y aprovechar las contradicciones entre los bloques imperialistas para colocarse en la posición más sólida para lidiar con el ataque soviético. Pero esto debía efectuarse de manera que, en general, contribuyera al avance de la lucha revolucionaria mundial y sin pedirles a los revolucionarios de los países pertenecientes al bloque estadounidense renunciar a la lucha o reducir la "revolución" a la lucha en contra de la Unión Soviética.
 
En conjunto, Mao y el cuartel general.... le dieron a esta contradicción un tratamiento revolucionario. Su línea fue apoyar las luchas revolucionarias auténticas en otros países, contando los pertenecientes al bloque estadounidense; al mismo tiempo les advertían a los revolucionarios que no permitieran a la Unión Soviética infiltrar, usar y convertir tales luchas en su propio apéndice so pretexto de darles "apoyo". Más aún, combatieron vigorosamente la línea de apoyarse en el imperialismo estadounidense –y de hecho capitular a él– y de vender la revolución en China so pretexto de "modernizarla" y "reforzar" su defensa contra la Unión Soviética.
 
Pero, por otra parte, cometieron el error (textual) de adoptar el análisis de que la Unión Soviética constituía la fuente más peligrosa de guerra, con una premisa similar a la de Stalin cuando declaró que los Estados imperialistas fascistas constituían el principal enemigo, a fines de la década de los años 30. Y al menos , en cierto grado, fomentaron la línea de "lucha nacional" contra la Unión Soviética en los Estados capitalistas e imperialistas que, conjuntamente con Estados Unidos, constituyen su bloque imperialista (tal como lo hizo Stalin, en la década del 30, con respecto a los países opuestos al bloque imperialista fascista). Como lo afirmó nuestro Partido en las Reuniones Conmemorativas de Mao Tse tung, en 1978:
 
«Este error, hasta cierto punto, fortaleció a los revisionistas en China quiénes estaban –y  están– diciendo que el peligro soviético a China justifica y hace preciso el abandono de la revolución allí y por todo el mundo. Este tipo de error por parte de los revolucionarios, como dijimos, ha existido en el movimiento comunista internacional desde los años 30 (sic) y existe una gran necesidad de recapitularlo y criticarlo más profundamente para evitarlo en el futuro(Subrayados nuestros)
 
«Al mismo tiempo, nuestro Partido ha planteado constante, y correctamente, una clara línea de demarcación entre la línea y las medidas de Mao, por una parte, y los traidores revisionistas que han usurpado el Poder aplastando el cuartel general del proletariado en el Partido Comunista después de la muerte de Mao, y que están restaurando rápidamente el capitalismo y capitulando al imperialismo, por otra parte. Y debe señalarse que, respecto a la contradicción entre defender un país socialista y avanzar la lucha a escala mundial, Mao y sus camaradas aprendieron de algunos errores de Stalin y los corrigieron. Ellos no adoptaron la posición de subordinar todo a la defensa de China.
 
Muy especialmente, reconocieron la importancia de dirigir la lucha de clases del proletariado contra la burguesía en China y de continuar la revolución bajo el socialismo, y la relación dialéctica de esto con una línea correcta de defender a China. Pero más que eso, como se apuntó más arriba, siguieron luchando por prestar apoyo a las luchas revolucionarias auténticas de otros países, aun dentro del bloque estadounidense.
 
De este modo, a pesar de algunos discrepancias que nuestro partido tiene con Mao sus camaradas sobre ciertas cuestiones relacionadas con la situación internacional, el carácter de la lucha revolucionaria en varios países imperialistas, y la relación entre esto y la defensa de China, de conjunto nosotros reconocemos su papel fundamentalmente revolucionario en esto y la necesidad de aprender de ciertos errores que cometieron en esta esfera. Lo más fundamental, como se indicó, es hacer un balance más completo de la línea y las acciones de Mao y otros revolucionarios de China, así como también de la historia del movimiento comunista internacional en cuanto a ese tópico, sus lecciones positivas y negativas, desde hace 40 años y más. Esto es de una importancia especialmente crucial en vista de la presente situación internacional, caracterizada no solo por el retroceso en China y por una gran confusión en el movimiento comunista internacional, sino también por la agudización de la crisis del imperialismo y las crecientes tendencias tanto hacia una guerra mundial como hacia la revolución....» (Subrayados nuestros).
 
Bien, las fuerzas en pugna, durante el proceso de la Revolución Cultural Proletaria, son tres fundamentalmente: La izquierda verdadera con Mao a la cabeza, Kang Sheng, Chen Po-ta, los cuatro (Chiang Ching, Chang Chun-chiao, Yao Wen-yuang y Huang Hung-wuen) algunos otros líderes entre ellos notoriamente Lin Piao.
 
La derecha con Liu Shao-shi, Teng Siao-ping, Peng Chen y otros a la cabeza.
 
Existía además una tercera fuerza centrista con Chou En-lai, que tiene muchos vínculos con la derecha a la cual sirve en última instancia.
 
La Gran Revolución Cultural Proletaria (GRCP) se desata 1966 por iniciativa de las masas de estudiantes, obreros y campesinos, la misma que es inmediatamente apoyada por el Presidente Mao y por los maoístas. En esta lucha Lin Piao tiene una actitud muy clara en favor de ella. Eso lo sabemos bien. La GRCP, centra sus ataques contra los seguidores del camino capitalista (la derecha), que poco a poco van perdiendo sus puestos y su influencia en medio de una marea de ascenso popular. Primero cae Peng Cheng el alcalde de Pekín, después Teng Siao-ping, entonces secretario general del PCCH. Su destitución viene acompañada de un castigo ejemplar pues Teng, el diminuto seguidor empedernido del camino capitalista, fue purgado con un dilatado destierro en el sur del país, relegado a tareas de recogedor de basuras. Finalmente Liu Shao-chi, presidente de la RPCH es destituido y fallece en esa condición. Lin Piao juega un papel muy importante incorporando, por pedido de Mao, al ejército que apoya firmemente el movimiento.
 
Chou En-lai, se encuentra en una situación muy difícil y parece que tarde o temprano caerá, pero ladinamente se mantiene en un discreto segundo plano y no es desplazado por instrucciones precisas de Mao y no es destituido juntamente con toda la derecha (error grave), porque Mao pensaba que atacar a Chou era abrir demasiado el frente enemigo. El cuartel general negro de la restauración estaba claramente definido, como tenemos dicho, en las personas de Liu Shao-shi, Teng Siao-ping, Peng Cheng, y otros.
 
Llega 1971, y el primer síntoma del grave avance de la derecha es la destitución en febrero de Chen Po-ta sin razón ni explicación alguna y luego, el 1o. de septiembre, súbitamente sin ningún aviso y sin ningún antecedente, "aparece" el affaire Lin Piao y se "dice" que éste ha muerto en un accidente aéreo cuando huía a la Unión Soviética, después de fracasar su "complot contra Mao para asesinarlo y usurpar el poder".
 
Esta versión es sencillamente, para nosotros, completamente falsa y ha sido montada hábilmente por la derecha china y especialmente por Chou En-lai en sus maniobras para servir a la derecha y derrocar a la izquierda, restaurando el capitalismo en China. En realidad se trató de un golpe de Estado típico, tramado en la oscuridad, a mansalva y con los recursos de la policía política ya a cargo de Hua Kuo-feng.
 
En principio, veamos cómo veían los camaradas norteamericanos y en especial Bob Avakian, estos problemas:
 
Un primer punto digno de consideración es aquel que plantea una similitud entre la política de Stalin a fines de la década de los años 30 de señalar a las potencias fascistas como el enemigo principal y secundario al imperialismo occidental, con la política china de acercamiento a los Estados Unidos y un enfrentamiento con la URSS. La comparación es absolutamente impertinente y no puede ser aceptada bajo ningún punto de vista. Ambos casos son radicalmente diferentes y las situaciones difieren tanto que admites similitud lógica alguna.
 
Stalin, en su tiempo, correctamente planteó una alianza anti-fascista a Occidente, la que fue rechazada sutilmente por los llamados "aliados" que pretendían muy claramente una confrontación entre la URSS y la Alemania hitlerista para especular con ella e intervenir alternativamente con uno y otro de los bandos en calidad de "salvadores".
 
Entonces, para evitar una enorme alianza de todos los países imperialistas coaligados contra la URSS en cumplimiento del anti-comunismo de Occidente, aceptó el conocido pacto de no-agresión con la Alemania nazista. No se puede confundir un pacto de No-agresión con una Alianza militar como malintencionadamente lo interpretan los famosos Anti-stalinistas.
 
Ante el brutal ataque de Hitler en junio 22 de 1941, violatorio del anterior pacto, Stalin aceptó una alianza defensiva con Gran Bretaña, Francia y los Estados Unidos. Precisamente algo que abominaba Hitler que siempre pensó en atacar uno a uno a sus adversarios. La táctica estaliniana fue enteramente correcta y no es aceptable una crítica que no sea la de los enemigos del socialismo y del comunismo.
 
En el caso chino que analizamos, la posibilidad de un ataque revisionista soviético a China era solamente una posibilidad y no se justifica, de modo alguno, la dirección de la política revisionista china- lamentablemente en vida de Mao-, de acercamiento al imperialismo y también a sus peores cachorros. Rechazamos pues por absurda la comparación tantas veces utilizada por el PCR de Estados Unidos.
 
Posteriormente cambiarían un tanto su visión los camaradas norteamericanos y en especial Robert Avakian, quién nos habla de ciertos errores y de discrepancias del PCR con Mao y sus camaradas sobre cuestiones internacionales. Veremos esto un poco más adelante.
 
Nosotros decíamos y sosteníamos y sostenemos que Lin Piao fue asesinado de la manera más canallesca por la derecha china. Como lo señalan bien todos los documentos, el asesinato (para nosotros) de Lin Piao, causó un trauma muy grande en China y es precisamente a partir de la desaparición de Lin cuando comienza a percibirse un brusco cambio en la política interior y sobre todo exterior de China, al influjo del dominio político creciente de Chou En-lai y su camarilla centrista que prácticamente había monopolizado el poder ya en franca coalición con la derecha revisionista.
 
Vamos a revisar algunos documentos en torno a este delicado problema y los cambios en la visión de los camaradas norteamericanos. Acá tenemos claramente el fondo del problema reconocido por Avakian, ya que efectivamente Chou En-lai consiguió la rehabilitación de los enemigos aprovechando una presunta y supuesta traición de Lin y logró, por lo menos ese fue el resultado, la aprobación y el consenso de Mao.
 
Por otra parte, tenemos otro documento incluso más claro y extraviado en cuanto a este tipo de interpretaciones que procede de una desconocida analista de la revista UMQG que tiene la virtud de poner en un ridículo excepcional la "teoría" revisionista sobre Lin Piao.
 
3. El MRI, su órgano UMQG (Zafia Ryan) y el asunto Lin Piao. 
 
Zafia Ryan en su artículo publicado en la revista UMQG: «Las ambiciones revolucionarias de una líder comunista» (una biografía corta de Chang Ching), plantea la situación del siguiente modo:
 
«En este momento se caldeaba una intensa lucha sobre la situación internacional dentro del liderazgo del PCCH. En 1970 Mao (y Chou aunque por diferentes razones) estuvo de acuerdo en una apertura hacia el occidente, creando una alianza entre la izquierda y las fuerzas centristas de Chou (principalmente la "vieja guardia" del centro del Partido y las jerarquías militares) contra Lin....»
 
Esto prueba que Lin tenía una línea firme de oposición a Chou y la derecha, porque una alianza con Chou, eso hay que entenderlo, era una alianza con la Derecha.
 
«La caída de Lin Piao fortaleció considerablemente la posición de Chou En-lai. Las circunstancias exigían (!!!!) a la izquierda hacer lo que Chou pregonaba: restaurar a los derechistas derribados (!!!) en la Revolución Cultural y colocarlos en los puestos (!!!) dejados por las fuerzas de Lin, incluyendo los del ejercito...(!!!)" (Subrayado y admiraciones nuestras).
 
El párrafo es realmente de antología y lo consignamos mostrando las incongruencias intolerables en un artículo maoísta. Como vemos muy claramente, la caída de Lin Piao fortaleció directamente a Chou En-lai y constituyó un triunfo de la derecha; lo que es imposible comprender es: ¿cómo un triunfo tan pleno y completo de la derecha, como fue la desaparición de Lin y el ascenso de Chou, puede ser interpretado por algunos como un "triunfo" izquierdista, en un cierto sentido?: ¿cuál?
 
En pocas palabras se sostiene que el vacío dejado por Lin ("triunfo" de la izquierda) necesariamente "exigía" (sic) dejar los puestos ocupados por los apoyantes de Lin, en poder de la derecha enemiga de la Revolución Cultural. ¿Cómo podemos afirmar seriamente que un triunfo de la derecha "exige" nuevas y mayores concesiones de la izquierda a la derecha?
 
Brevemente: la derecha ¡exigía! (¿quién era la derecha para exigir algo?) a la izquierda entregarle el poder con el pretexto de la caída de Lin. Un verdadero intríngulis, pero solamente para quiénes no quieren ver la verdad de frente.
 
El trabajo contradictorio de Zafia Ryan, se sostiene con un candor infantil que:
 
«La izquierda lanzó la campaña de crítica a Lin Piao y Confucio en 1974... Por alusión histórica esta campaña tenía por objetivo a Deng Xiao-ping (Confucio) y en forma secundaria a Chou En-lai, cuyo programa centrista era el vehículo para el ascenso de la Derecha...." 
 
Es realmente muy extraño que se sostenga seriamente que la campaña contra Lin y Confucio fuera dirigida hacia Deng y Chou (aunque secundariamente, se dice), nadie pudo advertir nunca que la profusa y difusa campaña tuviese ese sentido. En realidad fue una furiosa campaña contra Lin, la misma que favorecía plenamente a Deng y a Chou.
 
Concretamente Chou En-lai vuelve inmediatamente a ser el número 2. (En los hechos el 1, por la enfermedad de Mao). En realidad se inicia la etapa de pleno dominio de Chou En-lai (1971-1976) y es eso precisamente lo que se debe comprender. El camarada Mao ha sido desplazado por la línea de Chou que propugnaba la confrontación con la URSS y de acercamiento a los Estados Unidos. La derecha ha obtenido sendos y claros triunfos, pero los analistas del PCR-EU, piensan que fue un "éxito" de la izquierda. 
 
Veamos los hechos. China dirigida por Chou, inicia inmediatamente un acercamiento a los Estados Unidos, hasta llegar el propio viaje de Nixon a la China para entrevistar a Mao, con el antecedente de las varias visitas previas de Kissinger. Son tiempos difíciles para los maoístas del mundo que no pueden comprender que China se acerque a los Estados Unidos, es decir al imperialismo yanqui que está atacando sañudamente y mediante bombardeos criminales a la República Democrática de Vietnam y al Vietnam meridional. La China Popular se acerca no solamente a los Estados Unidos, sino a dictaduras nefastas como las de Pinochet en Chile, del genocida Suharto en Indonesia, de Ferdinand Marcos en Filipinas. Son bien recibidos en China los fascistas de la calaña del alemán reaccionario Franz Joseph Strauss y otros. ¿Cómo se podría decir, con estos antecedentes, que los camaradas chinos (léase Chou), no abandonaron la lucha revolucionaria de los pueblos por una supuesta defensa hipotética de China frente a una agresión soviética que existía solamente en los deseos de un Brezhnev y compañía pero que se veía imposible en la práctica? Muy por el contrario el abandono total de respaldo revolucionario a los pueblos oprimidos por el imperialismo fue descarado y brutal, obra de un Chou En-lai traidor y la hesitación de Mao.
 
Apenas los revolucionarios maoístas podíamos creer lo que veían nuestros ojos: el abrazo entre nuestro querido y respetado líder el Presidente Mao y el criminal de lesa humanidad Richard Nixon. ¡¡¿Podemos ocultar esto?!!
 
Ya sabemos que existen algunas explicaciones e inclusive justificaciones, algunas de ellas valederas, como aquella que asegura que la Unión Soviética del valetudinario Brezhnev, estaba preparando un ataque nuclear contra China, como vimos anteriormente, y que los análisis de Mao eran coincidentes en este punto con los de Chou que decía que los Estados Unidos estaban en decadencia (sic) y que era la Unión Soviética revisionista la enemiga mortal y principal de la China Popular. Aún así, no podemos justificar la enorme pérdida de prestigio que sufrió la China con la política de Chou tolerada por Mao.
 
Pero, volvamos atrás, decíamos que la caída de Lin Piao fue una victoria neta de la derecha, por consiguiente y a pesar de los supuestos "errores" de Lin, no podemos menos que alinear a éste en la izquierda. Se dice que Mao y la izquierda lanzaron la famosa campana "contra Lin y Confucio" y que para llevarla adelante se "tuvo que aceptar las exigencias de Chou y la derecha de atenuar y pasar por alto y finalmente revocar los veredictos de la Revolución Cultural". Es decir que se quiere justificar teóricamente una alianza subordinada con la derecha para acabar con un "enemigo" izquierdista por lo demás ya desaparecido.
 
¡¡Imposible aceptar esta lógica!!
 
Y no sólo eso, sino permitir a la derecha tomar los puestos de mando, mientras la izquierda se distrae con una confusa campaña contra....."Confucio y Lao Tse".
 
Para nosotros, entonces, no caben dudas: Lin Piao fue víctima de un complot asesino de la derecha china encabezada ya por Chou En-lai, que engañó además a Mao haciéndole creer que Lin pretendió asesinarlo.
 
La izquierda cayó en el engaño como verdadera "chorlita", mordió el anzuelo hábil y criminalmente maquinado por los derechistas Chou En-lai y Teng Siao-ping. En primer lugar dividieron la izquierda, ganancia neta, segundo, desorientaron a las masas, ganancia neta, tercero, desacreditaron a Mao, ganancia neta, cuarto, tomaron los puestos de mando, ganancia neta. Por tanto: ergo, la caída de Lin fue el punto de partida de la derrota de la Revolución Cultural y el inicio de la restauración capitalista en China, en vida de Mao, con su consentimiento, pero terrible y dramáticamente engañado por el centrista-derechista Chou En-lai que debe figurar entre los grandes traidores y enemigos de la China maoísta y como propiciador triunfante de la restauración capitalista.
 
Felizmente en una última intervención del camarada Raymond Lotta del PCR EU, leemos que se señala a Chou En-lai, como el patrón de Teng ("Un Mundo que Ganar" No. 20). La famosa, malhadada y errónea campaña contra Lin Piao y Confucio, presuntamente llevada a cabo por la izquierda, fue la continuación profundizada del error, pues le caía de perillas y como anillo al dedo a la derecha restauradora que, al ser rehabilitados todos sus miembros, incluido Teng Siao-ping, aplaudían dicha campaña justamente como opuesta a la Revolución Cultural, por haber sido planteada precisamente sobre los supuestos de la revocatoria de sus veredictos.
 
¡La campaña contra Lin y Confucio era la contraparte de la Revolución Cultural!
 
¿Dónde estaba la izquierda?, ¿qué estaba haciendo? ¿No se daba cuenta de la actividad febril de la derecha? ¿Por qué no alertaron al Presidente Mao de la gravedad de la situación que estaba enmascarada con la famosa campaña contra Confucio? ¡Qué confusión! 
 
Pero los izquierdistas Chiang Ching, Chang Chun-chiao, Yao Wen-huang y Wuan Hung- weng, no vieron la avasalladora ofensiva derechista y en lugar de combatirla a muerte, la consolidaron, la estimularon, "luchando" arduamente contra Lin que había muerto largos años atrás.
 
Lin Piao figuró en la centuria pasada (porque actualmente China ya no toca ni por casualidad el problema) en la lista de "réprobos" como traidor (en tiempos revisionistas), junto a los viejos anti-maoístas como Chen Tu-siu, Li Li-san y Wang Ming. En cambio han pasado a ser héroes "comunistas", Pen Te-juai, Liu Shao-chi, Peng Cheng, etc.
 
Pero la lista de los traidores según los maoístas es pues otra y debe estar encabezada precisamente por Chou En-lai, seguido muy de cerca por Teng Siao-ping, Liu Shao-chi, Peng Chen.
 
Lin Piao es recordado por nosotros, como el compañero íntimo del Presidente Mao, como el vencedor del traidor Pen Te-juai, como el conductor de las gloriosas fuerzas voluntarias que barrieron a los norteamericanos de Korea del Norte, del conductor de la GRCP, como el editor del famoso "Libro Rojo" y el autor del sensacional estudio: "¡Viva el Triunfo de la Guerra Popular!", que nuestro Partido reprodujo como una síntesis magistral de la obra militar de Mao.
 
4. AUTORES EXTRANJEROS SOBRE EL CASO LIN. 
 
4.1. Existe la versión de Michel Oksenberg, que sostiene que Lin Piao habría encargado a su hijo redactar una crítica dura contra Mao para "justificar" su presunto golpe militar contra Mao:
 
«Manufacturan contradicciones y divisiones para lograr su meta de dividir y reinar, destruyendo a cada grupo por turno para mantenerse en la posición de mando. Saben que atacar a todos al mismo tiempo es suicida, de manera que cada vez utilizan a una fuerza para atacar a otra. Hoy Mao utiliza a esta fuerza para atacar a aquella; mañana a aquella para atacar a ésta. Hoy utiliza palabras dulces y discurso meloso con aquellos a quienes quiere seducir, y mañana los condena a muerte por crímenes inventados. Quiénes hoy son sus huéspedes serán mañana sus prisioneros. Revisando la historia de las últimas décadas, ¿habrá alguien a quien haya apoyado inicialmente (Mao) que no haya sido finalmente sentenciado a muerte política? (La cita está tomada del documento que se afirma que ordenó redactar Lin Piao a su hijo como justificante de su complot para tomar el poder)» 
 
Es realmente difícil establecer la verdad y autenticidad de esta carta dado que proviene de la fuente oficial china ya controlada por los verdaderos complotadores contra Mao y sus aliados. La verdad es, según el propio Oksenberg, que Lin Piao se oponía a la política de acercamiento a Occidente, lo cual fue una de las razones para su asesinato. 
 
4. 2. LA VERSIÓN DE HENRY KISSINGER. 
 
Es muy importante conocer la versión del secretario de Estado yanqui Henry Kissinger sobre el problema de las relaciones entre Estados Unidos y China, precisamente en los momentos del derrocamiento de Lin Piao. Y tiene mucha importancia porque no se puede atribuir a Kissinger ninguna simpatía por unos o por otros. 
 
Primero Kissinger se refiere a la salud de Mao en julio de 1971 y comienza con esta asombrosa declaración: 
 
«Jamás conocí a nadie de quién emanara con tanta potencia una voluntad tan recia y concentrada. La sola presencia de Mao demostraba un acto de voluntad. Pero de Mao se desprendían vibraciones de fuerza, poder y voluntad. Era como tratar con una figura de otro mundo, que ocasionalmente levantaba una esquina del velo que oculta el futuro y permitía una mirada furtiva, pero jamás la visión total que a él solo le estaba permitida. Este era el coloso ante cuya presencia seríamos introducidos» 
 
Como se ve Kissinger no puede menos que admitir que Mao fue un genio de la humanidad. Es muy importante que un enemigo político reconozca la grandeza de Mao. 
 
Pero sigue Kissinger en el tema que nos ocupa: 
 
«Antes de nuestra primera entrevista, ya había sufrido una serie de derrames debilitantes. Sólo podía moverse con gran dificultad y hablaba con considerable esfuerzo. Las palabras parecían emanar de su corpachón con gran dificultad; eran expulsadas de sus cuerdas vocales en rachas, luego de las cuales, necesitaba volver a juntar energía para soltar una nueva andanada de agudas declaraciones. Más tarde, después que la salud de Mao se deterioró aún más, el esfuerzo se hizo tan evidente que era doloroso observarlo. 
 
En torno a los acontecimientos políticos del asunto Lin Piao que se produjeron en esas precisas fechas, según Kissinger, Mao dijo: 
 
«Existía un grupo reaccionario que se oponía a nuestro contacto con usted. El resultado fue que subieron a un avión y salieron del país. El avión se estrelló en Mongolia Exterior, explicaron Mao y Chou, por si no hubiéramos captado la referencia a Lin Piao»
 
Finalmente otra referencia a la salud de Mao en sus últimos años: 
 
«En sus últimos meses, privado de la palabra, limitado a actuar sólo unas pocas horas por día, tuvo suficiente pasión como para lanzar un nuevo exabrupto contra los pragmatistas, representados nuevamente por Teng Siao-ping 
 
Son estas las circunstancias de la salud quebrantada de Mao, las que hicieron posible que las calumnias de Chou En-lai, convencieran a Mao de que Lin Piao complotaba contra él y manipulaba un atentado contra su vida y la del propio Chou. Ladina y maliciosamente Chou engañó a Mao para deshacerse de Lin Piao, provocar su detención primero y cuando Lin se reveló a bordo de la nave que lo conducía a Pekín, se produjo la caída de avión provocando su muerte y de varios de sus allegados. 
 
El complot de Chou fue perfecto logrando imponer su línea reaccionaria y restauradora del capitalismo, eliminando físicamente a quién se oponía resueltamente a esa línea traidora. Otra prueba decisiva fue que Mao, después de la muerte de Chou en febrero de 1976, tuvo la voluntad, como anota Kissinger, de volver a destituir a Teng y tratar, en lo posible de reencauzar la revolución china. Era muy tarde, la muerte del coloso en septiembre del mismo año, determinó la victoria de Teng, mientras los "cuatro" seguían totalmente confundidos. 
 
5. CONCLUSIONES ÚLTIMAS
 
Nosotros no podemos pues, cerrando los ojos, censurar a Lin y convertirlo en un traidor, cuando justamente su desaparición, constituye el punto de arranque de la restauración capitalista en China, la derrota estrepitosa de la izquierda y el abandono paulatino, firme y sostenido por parte de los protegidos de Chou En-lai, de las enseñanzas de Mao. 
 
Los camaradas norteamericanos del PCR y el MRI, sostienen que tuvieron algunas diferencias con Mao y la izquierda por problemas internacionales, pero no aclaran cuáles fueron esas diferencias que incluso las califican de "ciertos errores", pero nosotros pensamos que dichas diferencias se referían al sesgo derechista que se impuso en China después de la caída de Lin Piao.
 
Vuelve, una y otra vez, el problema de la incorrecta analogía de la posición china de Chou (y Mao) de acercamiento a Occidente y enfrentamiento con la URSS, con la política de Stalin frente al fascismo que ya hemos rebatido completamente.
 
La Gran Revolución Cultural Proletaria, que nació en 1966, tuvo su abrupto final en 1971. A partir de entonces nace una nueva etapa, la del inicio de la restauración capitalista, la "dinastía" Chou, una etapa negra y vergonzosa que la enfermedad del Presidente Mao no le permitió ya combatir, en tanto que una izquierda desorientada caía en las redes del confusionismo más absoluto.
 
No se puede pues incluir la etapa 1971-1976, en los registros de la Revolución Cultural, como se está haciendo hasta ahora por parte de algunos partidos.
 
A partir de 1976 (la muerte de Mao), aparece la "dinastía" Hua (Kuo-feng), que sería de transición hasta la vuelta triunfante y "definitiva" de Teng Siao-ping. (La "dinastía" Teng, transitorio triunfo de la restauración capitalista).
 
Y la China cambió de color; ahora bajo la dictadura reaccionaria de Teng Siao-ping y sus sucesores, se está completando la restauración capitalista. El proceso que hemos descrito de toda la etapa decadente de la Revolución China, debe ser perfectamente comprendido para no caer en apreciaciones incorrectas que permitan la repetición de los errores.
 
Ya en el siglo XXI, China ha dejado de ser revisionista para convertirse en un país capitalista. Existe un Partido "Comunista" y también existe la República "Popular" China, pero sus actuales dirigentes han emprendido el camino capitalista pleno y han olvidado por completo el marxismo-leninismo-maoísmo. 
 
China hoy, es un estado capitalista que tiene pretensiones de hegemonía mundial. Como tal quita el sueño a Estados Unidos y al imperialismo. Algunos despistados creen que el crecimiento chino fue obra de Teng, pero olvidan que la base material, la liberación de China del feudalismo y el colonialismo fueron el fruto de la Gran Revolución dirigida y llevada al triunfo por el gran líder Mao Tse-tung.
 
Lejos ya de aquellos acontecimientos, nosotros maoístas bolivianos, relevamos y enaltecemos la memoria de los auténticos maoístas chinos que lamentablemente fueron derrotados en esta aguda y compleja lucha de clases en el seno del Partido Comunista de China:
 
Chen Po-ta, Lin Piao, Kang Sheng, Chang Chung Chiao y Chiang Ching, que jamás fueron derrotados por el revisionismo restaurador.
 
Nuestra posición, como se ve, es producto de un análisis lógico y dialéctico de los acontecimientos y concuerda coherentemente con todos los acontecimientos posteriores. Nuestra crítica respetuosa y marxista de Mao no le quita un ápice de su grandeza al Presidente y líder de todos los marxistas del siglo XXI.
 
La conclusión última que podemos extraer del asunto Lin Piao es que el c. Mao cometió uno de los errores más serios de su prodigiosa y extraordinaria vida política revolucionaria, principalmente debido a su salud muy quebrantada, equivocándose completamente en el caso Lin Piao y creyendo en la sinceridad del maquiavélico Chou En-lai. 
 
Redactado originalmente en octubre de 1996.
Corregido y aumentado en 2005.
Comisión Ideológica del PC-MLM.
«LIBERACIÓN», Editores.

Tomado de:
http://nuevademocraciapanama.blogspot.com/2011/02/lin-piao-un-cadaver-en-el-armario-o.html
Nota: El sitio que publica el artículo no menciona el país al que corresponde el partido que lo suscribe. Hemos establecido que es Bolivia a partir del primer párrafo del artículo, que se reproduce tal como aparece en el sitio de su publicación.